lunes, octubre 03, 2005

Defensa de la alegría

Defender la alegría como una trinchera
defenderla del escándalo y la rutina
de la miseria y los miserables
de las ausencias transitorias y las definitivas
defender la alegría como un principio
defenderla del pasmo y las pesadillas
de los neutrales y de los neutrones
de las dulces infamias y los graves diagnósticos
defender la alegría como una bandera
defenderla del rayo y la melancolía
de los ingenuos y de los canallas
de la retórica y los paros cardiacos
çde las endemias y las academias
defender la alegría como un destino
defenderla del fuego y de los bomberos
de los suicidas y los homicidas
de las vacaciones y del agobio
de la obligación de estar alegres
defender la alegría como una certeza
defenderla del óxido y la roña
de la famosa pátina del tiempo
del relente y del oportunismo
de los proxenetas de la risa
defender la alegría como un derecho
defenderla de dios y del invierno
de las mayúsculas y de la muerte
de los apellidos y las lástimas del azar
y también de la alegría.

Por Mario Benedetti.

sábado, septiembre 24, 2005

Fuego... El gallo de pelea

EL GALLO DE PELEA

Chi Hsing Tzu era entrenador de gallos de pelea. Empleado por el rey Hsuan, estaba entrenando un ave magnífica.

El rey no hacía más que preguntar si el ave estaba preparada para combatir. "Aún no", dijo el entrenador. "Está llena de fuego, dispuesta a pelear con cualquier otra ave. Es vanidosa y confía en su propia fuerza".

Diez días más tarde contestó de nuevo: "Todavía no. Explota en cuanto oye cantar a otra ave".

Diez días más tarde : "Aún no. Todavía se le pone ese gesto iracundo e hincha las plumas".

De nuevo diez días. El entrenador le dijo: "Ahora está ya casi listo. Cuando canta otro gallo, sus ojos ni siquiera parpadean. Se mantiene inmóvil como un gallo de madera. Es un luchador maduro. Las demás aves le mirarán una sola vez y echarán a correr".

Chuang Tsé (s. VI a. C.)

martes, septiembre 13, 2005

Tierra... Hombre que mira la tierra

Hombre que mira la tierra
Autor: Mario Benedetti

Cómo querría otra suerte para esta pobre reseca
que lleva todas las artes y los oficios
en cada uno de sus terrones
y ofrece su matriz reveladora
para las semillas que quizá nunca lleguen

cómo querría que un desborde caudal
viniera a redimirla
y la empapara con su sol en hervor
o sus lunas ondeadas
y las recorriera palmo a palmo
y la entendiera palma a palma
o que descendiera la lluvia inaugurándola
y le dejara cicatrices como zanjones
y un barro oscuro y dulce
con ojos como charcos

o que en su biografía
pobre madre reseca
irrumpiera de pronto el pueblo fértil
con azadones y argumentos
y arados y sudor y buenas nuevas
y las semillas de estreno recogieran
el legado de viejas raíces
como querrían que se escucharan
su verde gratitud y su orgasmo nutricio
y que el alambrado recogiera sus púas
ya que por fin sería nuestra y una

como querría esa suerte de tierra
y que vos muchachita
entre brotes o espigas
o aliento vegetal o abejas mensajeras
te extendieras allí
mirando por primera vez las nubes
y yo tapara lentamente el cielo.

viernes, agosto 19, 2005

Agua... sexual.

Rodando a goterones solos,
a gotas como dientes,
a espesos goterones
de mermelada y sangre,
rodando a goterones
cae el agua,
como una espada en gotas,
como un desgarrador rio de vidrio,
cae mordiendo,
golpeando el eje de la simetria,
pegando en las costuras del alma,
rompiendo cosas abandonadas,
empapando lo oscuro.

Solamente es un soplo,
mas humedo que el llanto,
un liquido,
un sudor,
un aceite sin nombre,
un movimiento agudo,
haciendose,
espesandose,
cae el agua,
a goterones lentos,
hacia su mar,
hacia su seco oceano,
hacia su ola sin agua.

Veo el verano extenso,
y un estertor saliendo
de un granero,
bodegas,
cigarras,
poblaciones,
estimulos,
habitaciones,
niñas durmiendo
con las manos en el corazon,
soñando con bandidos,
con incendios,
veo barcos,
veo arboles de medula
erizados como gatos rabiosos,
veo sangre,
puñales y medias de mujer,
y pelos de hombre,
veo camas,
veo corredores donde grita una virgen,
veo frazadas y organos y hoteles.

Veo los sueños sigilosos,
admito los postreros días,
y también los orígenes,
y también los recuerdos,
como un párpado atrozmente levantado a la fuerza
estoy mirando.

Y entonces hay este sonido:
un ruido rojo de huesos,
un pegarse de carne,
y piernas amarillas como espigas juntandose.
Yo escucho entre el disparo de los besos,
escucho,
sacudido entre respiraciones y sollozos.

Estoy mirando,
oyendo,
con la mitad del alma en el mar y la mitad del alma en la tierra,
y con las dos mitades del alma miro el mundo.

Y aunque cierre los ojos y me cubra el corazon enteramente,
veo caer agua sorda,
a goterones sordos.
Es como un huracan de gelatina,
como una catarata de espermas y medusas.
Veo correr un arco iris turbio.
Veo pasar sus aguas a través de los huesos.
Debajo del agua mansa,
esta la mejor corriente.
Pablo Neruda.

miércoles, agosto 17, 2005

Aire... enamorado y macabro.

El olor de la flor se fue,
como los besos que me dieron un día;
El color de la flor se fue:
¡me recordaba tanto a ti!

Una forma fría, vacía y sin vida,
yace en mi pecho abandonado,
y enmudece mi todavía caliente corazón
con su descanso frío y silencioso.

Aire, solo me queda el aire.

lunes, agosto 15, 2005

Inauguración del Blog.

Es lunes y fiesta en toda España... Buen día para dar comienzo a mi blog más íntimo. Los cuatro elementos más simples y, a la vez, más complejos:

  • El aire, fuente de vida que lo envuelve todo.
  • El agua, que nos refresca.
  • La tierra, de donde venimos y a donde volveremos.
  • El fuego, donde se inició nuestro intelecto.

Todos los elementos unidos en nuestra maravillosa diversidad: todos tenemos un norte, un sur, un este, un oeste y mucho más, aún por descubrir.

Quiero que este blog que hoy da comienzo sea una puerta abierta al arte y la creación, una exaltación de la belleza más humana, que es, contra todo tipo de marketing, la que no se ve pero se siente. Estáis todos invitados a colaborar y a comentar cuanto os parezca oportuno.

Saludos.